Apocalipsis 1: 13 interpretación

 “y en medio de los siete candeleros, uno semejante al Hijo del Hombre, vestido de una ropa que llegaba hasta los pies, y ceñido por el pecho con un cinto de oro”.

Este versículo forma parte de la visión que el apóstol Juan tuvo en la isla de Patmos, en la que se le revelaron las cosas que debían suceder en el futuro. En esta visión, Juan ve a Jesucristo en medio de siete candeleros, representando a las siete iglesias de Asia a las que se dirige la carta que Juan escribe en los siguientes capítulos.

El término “Hijo del Hombre” era un título que Jesús usaba para referirse a sí mismo, y que se encuentra en los evangelios. Este título enfatiza la humanidad de Jesús, y su identificación con la humanidad en general. En este versículo, Jesús aparece con una ropa que llega hasta los pies, lo que indica su dignidad y majestad. El cinto de oro que lo ceñía por el pecho simboliza su autoridad y poder.

La imagen de Jesús en medio de los candeleros también es una representación simbólica de su presencia en la iglesia. Los candeleros representan a las iglesias, y la presencia de Jesús en medio de ellos indica que él está presente en la vida de la iglesia y que es su cabeza.

En este versículo, se encuentra una descripción detallada de la apariencia de Jesús, lo que indica su importancia y significado en la revelación que se está presentando. La imagen de Jesús en medio de los candeleros es un recordatorio para las iglesias de que él está presente y que es quien les da autoridad y poder para cumplir su misión.

En resumen

El versículo de Apocalipsis 1:13 describe la aparición de Jesucristo en medio de los candeleros, y su vestimenta y cinto de oro simbolizan su autoridad y poder. Esta imagen es una representación simbólica de su presencia en la iglesia y su importancia en la revelación que se presenta en el libro de Apocalipsis.