Apocalipsis 2: 2 interpretación
“Yo conozco tus obras, y tu arduo trabajo y paciencia; y que no puedes soportar a los malos, y has probado a los que se dicen ser apóstoles, y no lo son, y los has hallado mentirosos”.
Este versículo es parte de las cartas del apóstol Juan a las siete iglesias de Asia, y específicamente se refiere a la iglesia de Éfeso. En este pasaje, Jesús se dirige a la iglesia y le habla directamente a través de Juan.
La primera parte del versículo, “Yo conozco tus obras, y tu arduo trabajo y paciencia”, es un reconocimiento de los esfuerzos de la iglesia en su servicio a Dios. Las obras que realiza la iglesia son conocidas por Jesús, y se destaca el trabajo arduo y la paciencia que han tenido para mantenerse firmes en la fe.
La segunda parte del versículo, “y que no puedes soportar a los malos”, indica que la iglesia ha sido fiel en su lucha contra el mal. Ha resistido la tentación y ha mantenido su integridad espiritual.
La tercera parte del versículo, “y has probado a los que se dicen ser apóstoles, y no lo son, y los has hallado mentirosos”, se refiere a la prueba que la iglesia ha realizado para asegurarse de que los líderes religiosos que la guían son verdaderamente apóstoles de Jesús. La iglesia ha sido diligente en su búsqueda de la verdad y ha sido capaz de discernir a los falsos maestros que han intentado infiltrarse en sus filas.
En general, este versículo destaca el papel clave que juega la iglesia en la lucha contra el mal y la protección de las enseñanzas de Jesús. La iglesia debe ser diligente en su servicio a Dios y mantenerse firme en su fe, resistiendo la tentación y probando a los líderes religiosos para asegurarse de que son verdaderamente apóstoles de Jesús.
En resumen
Apocalipsis 2:2 es un recordatorio para la iglesia de que sus acciones son conocidas por Jesús, pero también es un reconocimiento de su arduo trabajo y su paciencia. Además, este versículo destaca la importancia de la lucha contra el mal y la necesidad de probar a los líderes religiosos para asegurarse de que son verdaderamente apóstoles de Jesús.