Apocalipsis 2: 20 interpretación
“Pero tengo unas pocas cosas contra ti, que toleras que esa mujer Jezabel, que se dice profetisa, enseñe y seduzca a mis siervos a fornicar y a comer cosas sacrificadas a los ídolos.”
Este versículo se encuentra en el contexto de una carta enviada por Jesucristo a la iglesia en Tiatira, una de las siete iglesias a las que se dirige el libro del Apocalipsis. Jesús elogia a la iglesia por sus obras, caridad, servicio, fe y paciencia. Sin embargo, también señala un problema grave en su comunidad: la tolerancia hacia una mujer llamada Jezabel, quien es acusada de ser una falsa profetisa.
El nombre Jezabel hace referencia a una reina infame de Israel, esposa del rey Acab, que aparece en el Antiguo Testamento (1 Reyes 16:31-33; 2 Reyes 9:30-37). La Jezabel del Antiguo Testamento era conocida por promover la adoración a Baal y otros dioses paganos en Israel y perseguir a los profetas del Dios verdadero. En el caso del versículo de Apocalipsis, no está claro si el nombre Jezabel es un nombre real o un apodo simbólico, pero lo que sí es evidente es que esta mujer estaba llevando a los cristianos de Tiatira a prácticas inmorales y idolatría.
La acusación contra Jezabel en Apocalipsis es que enseña y seduce a los siervos de Dios a cometer actos de fornicación y a comer alimentos sacrificados a ídolos. La fornicación en este contexto puede referirse tanto a relaciones sexuales ilícitas como a un compromiso espiritual inapropiado con las prácticas y creencias paganas. Comer alimentos sacrificados a ídolos era un tema de debate en la iglesia primitiva, ya que algunos cristianos consideraban que esto era participar en la idolatría y otros argumentaban que los ídolos no tenían poder real (1 Corintios 8).
La tolerancia de la iglesia en Tiatira hacia Jezabel es un problema serio, ya que va en contra del llamado a la santidad y la fidelidad a Dios. Jesús advierte que juzgará a Jezabel y a aquellos que siguen sus enseñanzas, y exhorta a los cristianos a arrepentirse y apartarse de estas prácticas (Apocalipsis 2:21-23).
Este versículo de Apocalipsis 2:20 nos recuerda la importancia de discernir y rechazar las falsas enseñanzas y prácticas que pueden infiltrarse en la iglesia y alejarnos de la voluntad de Dios. Además, nos anima a mantenernos fieles a las enseñanzas de Jesucristo y a no tolerar el pecado y la idolatría en nuestras vidas y comunidades. Como cristianos, debemos estar alerta y proteger nuestra relación con Dios, asegurándonos de que nuestras acciones y creencias estén siempre en línea con su Palabra y su verdad.